Se encontró en un mundo donde el tiempo y el espacio se entrelazaban de formas inimaginables. Los edificios flotaban en el aire, las calles se retorcían como serpientes y el cielo cambiaba de color con cada parpadeo. Todo parecía una versión distorsionada de la realidad, un refrito caótico de dimensiones desconocidas.
Imagen: Pinterest |
Decidió explorar aquel extraño lugar y pronto se dio cuenta de que no estaba sola. Criaturas fantásticas la observaban desde las sombras, seres mitad humanos mitad máquinas se desplazaban con gracia por las calles distorsionadas y seres luminosos danzaban en el aire al ritmo de una melodía desconocida.
A medida que avanzaba entre aquel laberinto espacio-temporal, empezó a notar que los límites entre pasado, presente y futuro se desvanecían. Se encontraba cara a cara con versiones alternativas de sí misma, reviviendo momentos que creía olvidados y vislumbrando futuros inciertos.
Finalmente, tras una travesía llena de sorpresas y revelaciones, comprendió el verdadero significado del «Refrito espacio-temporal»: la posibilidad de reinventarse, de explorar nuevos horizontes y de abrazar la complejidad del tiempo y el espacio en todas sus formas.
Al cerrar el libro mágico, volvió a la biblioteca con una sonrisa en los labios y el corazón lleno de experiencias inolvidables. Había vivido una aventura única, un refrito espacio-temporal que cambiaría su visión del mundo para siempre.
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